La investigación se originó en 2004 por la colaboración entre el laboratorio de Óptica Integrada y el de Inmunoelectroanálisis de la Universidad de Oviedo. Se centra en el grabado de microcanales en vidrio para microchips de electroforesis capilar, mejorando la eficiencia de biosensores ópticos mediante la integración de óptica y microfluídica.
